Luego del fuerte cuestionamiento de Moisés al final de la parshá Shemot, Dios le contesta al principio de la parshá Vaerá que Él está revelando un nuevo aspecto de Si mismo al pueblo Judío que ni siquiera sus antepasados, quienes fueron gigantes espirituales, alguna vez experimentaron: Una relación personal con Dios que impregna a la persona, no solamente a través de una fe imperecedera en Di-s, sino también a través de la lógica y la comprensión humana. Esto es
lo que experimentaremos en la Era Mesiánica: Fe y lógica, frecuentemente opuestas entre si, se volverán complementarias y es así exactamente como Moisés experimentó la vida.
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